Robbie Williams logró vender su “mansión embrujada” pero tuvo que bajarle el precio
Robbie Williams vendió su mansión de campo en Wiltshire, Inglaterra, pero no fue un buen negocio. Tuvo que bajarle el precio luego de algunas declaraciones del artista donde destacó que estaba embrujada.
El músico la compró junto a su mujer Ayda Field en 2008 a 12 millones de dólares. En la pandemia, las casas rurales en el suroeste de Inglaterra aumentaron más del 10 por ciento ya que varias personas se mudaron de las ciudades al campo.
La mansión tiene un valor actual cercano a los 18 millones de dólares, pero el artista decidió venderla en 9 millones.
Las características de la mansión embrujada
Se trata de un lugar mágico y con muchas comodidades. Construida en el siglo XVIII se encuentra en una propiedad de 29 hectáreas, tiene canchas de fútbol y tenis. Para los días de calor, se puede disfrutar de una piscina de 23 metros de largo.
Pero esto no es todo: tiene un hangar para helicópteros y gimnasio. Las visitas puede disfrutar de sus días de descanso alojados en una casa adicional.
En 2020, Robbie Williams reveló que la casa estaba embrujada. Tanto el cantante, como su esposa y sus cuatro hijos experimentaron distintas sensaciones en sus habitaciones.
“Hay cuatro cuartos de los que sospecho. Me da escalofríos. Teddy, nuestra hija, estaba durmiendo en uno pero la saqué. Ella me contó que tenía miedo y que no le gustaba esa casa. Le respondí que a mi también me daba miedo y que no quería que siguiera durmiendo en ese lugar”.
“Creo que puede penetrar las paredes y dejar una esencia que permanece durante mucho tiempo”, agregó. A su vez, la propiedad tiene un basural cerca y deja un olor al que Robbie describió como “horrible”.
Recordemos que hace un tiempo, el cantante contó su experiencia con los ovnis y hasta fue parte de un documental. “De verdad, vi uno volando justo encima de mi cabeza. Estaba tan cerca, que podría haberle golpeado con una pelota de tenis. Y no es la primera vez que estoy presente en medio de una situación extraña o inexplicable. Viví ciertos fenómenos que no puedo comprender”, describió en una charla con “60 Minutes”.