Las dolorosas declaraciones de Adele
Adele no siente nada más que amor por su ex marido. La cantante de “Easy on Me” habló con franqueza sobre su divorcio de Simon Konecki durante su entrevista con Oprah Winfrey, y dijo que está increíblemente agradecida por su matrimonio a pesar de su final.
“Creo que Simon me salvó la vida”, reflexionó Adele ante las cámaras en un especial de dos horas para la cadena CBS. “Llegó en un momento donde la estabilidad que él y Angelo me han dado, nadie más me la hubiera podido dar”, detalló la exitosa artista británica, que acaba de publicar su esperado álbum ‘30′ después de seis años lejos de los escenarios.
“Era tan joven y creo que me habría perdido un poco en todo esto”, continuó, refiriéndose a su meteórico ascenso a la fama. “Creo que de no haberlo conocido podría haber ido fácilmente por caminos no recomendables y a una especie de autodestrucción”.
Adele, de 33 años, comentó que Konecki, de 47 años, le brindó estabilidad durante un momento de mucha agitación en su vida personal. “Llegó y se mantuvo estable. La persona más estable que he tenido en mi vida hasta ese momento. Incluso ahora, le confío mi vida “, agregó, y llamó al empresario y a su hijo de 9 años sus “ángeles“.
Aunque Adele y Konecki mantienen una gran relación hoy en día, dijo que la parte más difícil de su divorcio fue explicar la separación a su hijo, que tenía 6 años en ese momento. “Tratar de explicarle a un niño de 6 años, ‘Amo [a tu papá], pero no estoy enamorada de él’, no tiene absolutamente ningún sentido para un niño de 6 años”, dijo.
Adele pidió el divorcio de Konecki en septiembre de 2019, meses después de vivir vidas separadas. Luego se rumoreó que estaba saliendo con el rapero británico Skepta, pero ahora está en una relación con el famoso agente deportivo de la NBA Rich Paul.
“Es divertido y muy inteligente. Es muy, muy inteligente. Es bastante increíble verlo hacer lo que hace“, comentó sobre el representante de LeBron James. Y explicó que es la primera vez que “se ama a mí misma y ha estado abierta a amar y ser amada por otra persona”.
Adele actuó en el Observatorio Griffith en Los Ángeles para una audiencia repleta de estrellas que incluyó a Drake, Selena Gomez, Leonardo DiCaprio, Kris Jenner, Ellen DeGeneres, James Corden, Lizzo, Gabrielle Union, Dwyane Wade y Melissa McCarthy.
Inició su presentación con el hit “Hello” y luego interpretó algunas canciones de su nuevo álbum, que sale a la venta el 19 de noviembre, así como otros temas favoritos del público como “Skyfall”, “When We Were Young”, “Someone Like You” y “Rolling in the Deep”.
Un divorcio que la hizo adelgazar 45 kilos
En la entrevista aseguró que se sintió muy “avergonzada” de que su relación con el padre de su hijo fracasara, al igual que la de sus padres. “Lo intenté. Estaba tan avergonzada. Casi como si le hubiera faltado el respeto al casarme y luego divorciarme tan rápido”, explicó sobre lo culpable que se sentía cuando solicitó el divorcio para poder encontrar la felicidad.
“Nada tan aterrador como lo que he pasado en los últimos dos años a puerta cerrada”, dijo. Su nuevo disco, de hecho, es la culminación de un largo proceso emocional que empieza en 2018 con la separación de su marido tras ocho años de matrimonio.
Hablando con Oprah, Adele explicó con más detalle cómo le afectó su divorcio. Afirmó que el proceso fue muy difícil para ella, ya que sintió que había traicionado su propia idea del matrimonio al separarse. “Toda mi vida he estado obsesionada con la idea de crear una familia, de tener lo que yo no tuve”, explicó la cantante, cuyo padre se fue de casa cuando ella tenía dos años.“Desde muy joven me prometí a mí misma que, cuando tuviera hijos, permaneceríamos juntos. Y lo intenté durante mucho, mucho tiempo”, añadió.
La frustración de no poder lograrlo y la evidencia de que la única solución era la separación le hicieron sufrir “tremendos ataques de ansiedad”. Y en su lucha por controlarlos, la cantante adoptó un régimen de entretenimiento que terminó haciéndole perder 45 kilos en dos años. Todo empezó con visitas esporádicas al gimnasio, donde se dio cuenta de cómo el ejercicio físico lograba sacarla de su estado casi permanente de ansiedad. Y a partir de ahí empezó a ir todos los días. “Me ayudó a poner mi mente en un buen lugar”, afirmó.
Fue en su entrevista para Vogue que reveló que hace ejercicio “dos o tres veces al día”. Adele contó a Oprah que su ejercicio favorito es levantar pesas. También es una gran aficionada al boxeo. “Tengo un gancho izquierdo que podría matarte”, contó, entre risas.
Cuando Oprah le preguntó por cómo la hacía sentir el hecho de que determinadas personas se hubiesen sentido dolidas, ofendidas o decepcionadas por su pérdida de peso, Adele le respondió: “No es mi trabajo validar cómo se sienten las personas con respecto a sus propios cuerpos. Lo siento si hice que alguien se sienta horrible consigo mismo, pero ese no es mi trabajo. Ya tengo bastante con tratar de arreglar mi propia vida”.
Se reconcilió con su padre antes de que falleciera
En su extensa conversación con Oprah, Adele también habló de uno de los capítulos más dolorosos de su vida. Recordó la angustia que le causó su padre alcohólico cuando la abandonó cuando era una niña y cómo se reconcilió con él poco antes de su muerte.
Su padre, Mark Evans, murió de cáncer de intestino el pasado mes de mayo y confesó que antes de que eso sucediera viajó a Gales y pudo reconciliarse con él. Con el tiempo, la cantante pudo entender que lo que verdaderamente la separó de su padre fue el alcohol. Un mes antes de su fallecimiento, padre e hija pudieron hablar y sanar sus heridas.
Adele contó que su padre fue la primera persona en escuchar su nuevo álbum.
También compartió que dejó de beber después de su muerte y cómo impactó en su nuevo estilo de vida . “Una vez que me di cuenta de que tenía que hacer mucho para trabajar en mí misma, dejé de beber y comencé a hacer mucho ejercicio”, detalló la exitosa artista.